Pan de ajo y queso gratinado

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A menudo nos complicamos la vida con recetas imposibles cuando casi siempre la felicidad se encuentra a solo unos minutos de distancia, porque exactamente la felicidad es lo que se alcanza al morder este pan de ajo y queso gratinado.
La receta de pan de ajo y queso gratinado no podría ser más fácil. Además se prepara con ingredientes que siempre tenemos en casa (pan, queso, mantequilla, aceite, ajos,especias…) así que nos puede sacar de un apuro en cualquier momento o servir para acompañar cualquier comida, aunque es muy adecuado para carnes, pastas y ensaladas.

Ingredientes para 1 barra de pan

• 1 barra de pan sin mucha miga, 40g de mantequilla, 6 cucharadas de aceite de oliva, 2 cucharadas de vinagre, 2 dientes de ajo, queso para rallar (cheddar curado, mozzarella, emmental…) y especias variadas (orégano, albahaca y perejil)

Cómo hacer pan de ajo y queso gratinado

Empezaremos preparando un aliño de mantequilla y especias. Para ello trabajamos la mantequilla con el aceite y el vinagre hasta que tenga una consistencia similar a la mayonesa (al principio usamos un tenedor, luego la batidora), incorporamos los dientes de ajo y las especias (también podemos añadir algo de ajo en polvo) y volvemos a batir hasta conseguir una salsa blanca y homogénea.
Con ese aliño untamos las rebanadas de pan. Podéis cortar las rebanadas longitudinalmente (como si fuera la rebanada de un bocata) o transversalmente (como si fuera para montaditos), eso depende un poco de si es para acompañar o para picar.
Por último, añadimos el queso rallado (podéis usar el que más os guste, en mi caso cheddar curado que tenía en casa) espolvoreamos un poco de orégano y perejil picado y horneamos durante unos 10 minutos a 225ºC en la parte superior del horno, hasta que el pan se tueste y el queso se derrita y dore. Servir caliente.
Tiempo de elaboración | 20 minutos
Dificultad | Fácil

Degustación

Aunque su nombre, pan de ajo y queso gratinado, hace pensar que esta receta tiene un fuerte sabor a ajo, la realidad es que no tanto, al menos con las proporciones que he usado. Tienen más presencia el queso y las especias, aunque desde luego se nota el delicioso toque del ajo. Si os gusta más fuerte o más suave, simplemente añadid un diente o usad uno menos.