Calabacitas de papel rellenas para Halloween

Halloween llega a Directo al Paladar así que durante estos días podréis disfrutar de distintas recetas y bonitas ideas gastronómicas para acompañar esta fiesta de origen celta. Si la noche de difuntos celebráis en casa o asistís a una fiesta de este tipo, seguro que estas bonitas calabacitas de papel rellenas os encantarán para obsequiar con dulces a los más pequeños.
Son muy simples de elaborar y se hacen bastante rápido a no ser que hagamos docenas y docenas de calabazas porque entonces el trabajo se convierte en algo tedioso. Incluso es una manualidad apta para que los peques de la casa os acompañen en su realización, siempre y cuando tengan una tijera apta para ellos.

Necesitamos

• 1 rollo de papel pinocho naranja, 1 rollo de papel pinocho verde, 1 tijera, 1 rollo de celofán, gominolas de Halloween variadas.

Cómo hacer calabacitas de papel rellenas para Halloween

Lo primero que haremos será colocar todos los materiales encima de la mesa de trabajo, esto nos facilitará la tarea para trabajar más rápido y sin movernos del sitio. Estiramos primero el papel naranja, que es con el que formaremos el cuerpo de las calabacitas.
Con ayuda de una plantilla, compás casero o como en este caso con la tapa de una cazuela de 22 cm de diámetro, marcamos presionando con un lápiz o rotulador, toda la circunferencia de la tapa, que hará de base para cada calabaza.

Repetimos la operación y marcamos varias circunferencias, ya que para calabaza utilizaremos dos círculos de papel naranja, así la base será más sólida y con el peso de los dulces o gominolas evitamos que se pueda romper. Con mucho cuidado, ayudándonos de la tijera, recortamos todos los redondeles.
Colocamos dos círculos de papel uno sobre otro y en el centro ponemos varias gominolas, unas cinco o seis, según su tamaño, ya que como tenemos que cerrar el papel, debe quedarnos espacio en la parte superior para ello, y si ponemos demasiados dulces sería mucho más complicado.
Cerramos el círculo hacia arriba, formando un saquito y teniendo cuidado que los dulces queden centrados para que la calabaza quede bien formada. Incluso podemos retorcer un poco la punta para que no se abran. Estiramos muy bien el papel verde y cortamos una tira de 40 × 5 centímetros, la doblamos a los largos un para de veces para que tenga más grosor y envolvemos con ella, poco a poco, la punta de la calabaza.

Con un dedo sujetamos el empiece para ayudarnos hasta que llevemos varias vueltas, dejando un poco de papel en el extremo que hará de adorno. Terminamos por detrás y sujetamos con un poco de celofán. Retorcemos en espiral la punta para imitar a una calabaza real.